“Para mí es más importante que los jóvenes tengan un proyecto de vida a que solo piensen en entrar en una universidad”
Diana Puelles, directora del colegio Manuel Bulnes Prieto de Quilpué, nos comentó su experiencia con las charlas de Inspiring Girls y el impacto positivo que tiene en las y los adolescentes.
La brecha educativa es un problema de orden global. Sin embargo, Latinoamérica adolece enormemente en esta materia. Chile no escapa de esta realidad. La deserción escolar, por ejemplo, sigue siendo uno de los principales retos a superar. Según cifras del Ministerio de Educación (MINEDUC) hasta 2020 había más de 186 mil niños y jóvenes, de 5 a 21 años, fuera del sistema escolar; en 2021 se cuentan otros 39 mil que no se matricularon en ningún colegio.
Afortunadamente, son muchos los programas y alternativas que se están implementando para subsanar, de a poco, los graves problemas que hoy en día enfrenta la educación. Uno de ellos son las visitas programadas por la Fundación Inspiring Girls, quienes realizan distintos talleres dentro de las aulas con el fin de abordar temas como la inteligencia emocional, la autoestima, el liderazgo, mentalidad de éxito, referentes profesionales y equidad de género, temas que aún no forman parte de las mallas curriculares.
Para Diana Puelles, directora del Colegio Bulnes Prieto, ubicado en Quilpué, estas iniciativas permiten que los alumnos amplíen su mirada y vean las otras alternativas que tienen a la mano. En el caso del Colegio Bulnes, la actividad realizada contó con la participación de 9 mentoras de distintas áreas y profesiones, que acudieron para relatar su experiencia de vida y servir de inspiración a los adolescentes de 4.º medio.
“La fundación vino con 9 charlistas para que contaran su experiencia de vida con los estudiantes de 4.º medio. Había diferentes tipos de realidades profesionales, desde la que estudió en una universidad y luego empezó a trabajar, hasta la que partió trabajando y luego se fue profesionalizando. Y es muy valioso que los chicos tuviesen esa mirada de los caminos que pueden tomar, porque uno de los aspectos que se repiten en nuestros contextos es que los chicos y chicas no tienen referentes distintos a lo que ven en casa. Y en el caso de la perspectiva de género, las chicas pueden identificar que tienen muchas más opciones de lo que ellas mismas piensan o creen”, agregó.
Asimismo, Puelles explicó que unos de los factores más importantes a trabajar, sobre todo en los estudiantes más vulnerables, es que sepan que tienen otras alternativas y que el no ingresar a una universidad inmediatamente que se gradúan no significa que fracasaron o que no van a lograr nada en la vida.
“Una de las cosas a derribar es la mirada de que solo hay un camino válido y que si no tomas ese camino entonces te irá mal. Y no, si ellos tienen claro un proyecto de vida, eso, para mí, es más exitoso que entrar o no a una carrera, porque muchas veces entran a una carrera y luego abandonan porque se dan cuenta de que no querían estudiar y solamente lo hicieron porque les dijeron que eso era lo que debían hacer. Es muy distinto tener un proyecto de vida, tener claro qué es lo que quieres lograr, por cuál camino debes ir y que para lograr eso necesitas esforzarte. Hay que crear más instancias que ayuden a los estudiantes a crear proyectos de vida”, añadió.
Con respecto a los retos que enfrentan las mujeres en el ámbito escolar, detalló que muchas de las estudiantes deben encargarse del cuidado de sus hermanos, o de las labores del hogar, lo cual las obliga a faltar de forma regular a sus clases.
“En el caso de la perspectiva de género, nosotros luchamos con las familias, porque muchas veces las niñas faltan a clases porque se están ocupando de las tareas del hogar. En pandemia se vio mucho eso, por ejemplo, que las niñas debían cuidar a la abuela o a los hermanos. Y en el caso de los niños no era esa realidad, sino que muchos de ellos tenían que salir a trabajar. Tuvimos muchos niños que tuvieron que trabajar, mientras que las niñas hacían trabajo de casa. Entonces fue una lucha con las familias, porque se vulneraba el derecho a la educación de los chiquillos. Aún vemos mucho ese tema de las obligaciones de la casa que recae solo en las niñas. Los roles de género siguen estando muy marcados, por más que en el colegio tratamos de erradicar estos roles”, indicó.
Para finalizar, Puelles agregó que es indispensable fomentar instancias que ayuden a los estudiantes a crear proyectos de vida, que tengan espacios para que conozcan otras alternativas y también que tengan la oportunidad de escuchar otros referentes que le sirvan de inspiración.
Trinidad Navarro Torres