“Creo que es fundamental que las niñas desarrollen competencias técnicas”
Desde su experiencia en el sector financiero hasta su actual trabajo en una empresa de seguros, María José Rioja es psicóloga, con magíster en Desarrollo Organizacional y MBA y ha demostrado su capacidad para adaptarse y sobresalir en diferentes ámbitos.
En un mundo que lucha por alcanzar la igualdad de género, la discriminación sigue siendo un obstáculo significativo, incluso en países con avances notables.
En Chile, según un informe de la Dirección del Trabajo, el 30% de las mujeres han enfrentado alguna forma de discriminación laboral por género, mientras que estudios del Servicio Nacional de la Mujer y la Equidad de Género (SERNAM) revelan que la brecha salarial entre hombres y mujeres aún persiste, alcanzando un 23% en 2022. Estas cifras subrayan la importancia de la perseverancia y la capacidad de aprendizaje continuo para superar barreras y crecer profesionalmente en entornos desafiantes.
En este contexto, conversamos con María José Rioja, una profesional de la psicología que comenzó su trayectoria en el ámbito de la venta mayorista, para luego pasar al mundo financiero, donde trabajó durante ocho años. Tras retirarse del sector financiero, se dedicó a temas de diversidad sexual y posteriormente asumió el cargo de gerente de personas y directora de recursos humanos en una minera del sur de Chile. Actualmente, se desempeña en una empresa familiar orientada a los seguros.
A lo largo de su trayectoria, María José ha enfrentado diversos desafíos, incluyendo la discriminación por género y la necesidad de adaptarse a nuevos entornos laborales. Sin embargo, su perseverancia y capacidad de aprendizaje le han permitido superar estos obstáculos y alcanzar el éxito en su carrera.
Y es precisamente esta tenacidad lo que le gustaría transmitirles a las niñas, niños y adolescentes que participan en las actividades de Inspirin Girls.
“La experiencia participando en el Speed Dating, fue maravillosa. Estaba un poco nerviosa al principio, pero fue muy gratificante. Las niñas eran muy diversas, algunas más calladas, otras más curiosas. Recuerdo que se me hizo cortísimo el tiempo compartido con ellas. Pero me encantó ver cómo la experiencia de cada una de nosotras les va a servir como referencia a cada una de ellas”, agrega.
Asimismo, desea transmitir a las niñas y adolescentes que las decisiones que toman en su vida no determinan su futuro, ya que lo más importante es que busquen aquello que las haga sentir en armonía consigo mismas y con sus acciones.
“Me gustaría que entiendan que las decisiones que tomen en su vida no determinan su futuro de manera absoluta. Lo importante es que busquen lo que las hace sentir en armonía con quienes son y con lo que hacen. A veces, se carga demasiada responsabilidad en una niña de 17 años. Es crucial que sepan que siempre hay oportunidad para crecer y aprender”, explica.
María José se siente muy identificada con la mirada de la fundación y considera que el trabajo que realizan con los jóvenes es crucial para el cambio cultural y la equidad de género. A pesar de estar aún en proceso de aprendizaje, siente que tiene mucho que aportar y se encuentra feliz de formar parte de la organización.