Raquel Vera, ingeniera de profesión, se ha desarrollado en el área inmobiliaria, específicamente en inversión y gestión de bienes inmuebles. Nos comentó sobre su proceso personal para conseguir el autoliderazgo desde el autoconocimiento de su niña interior y la importancia de encontrar un lugar seguro.
Compartió sus experiencias personales, incluyendo desafíos en su infancia y relaciones que ha tenido durante su vida, que moldearon su enfoque hacia el autodescubrimiento. Comentó que la autoexploración la llevó a abrazar el concepto de autoliderazgo, transformando la dependencia emocional en independencia y empoderamiento personal. De esa forma, Raquel dice que alcanzó el autoliderazgo, lo que ella define como “la capacidad de hacer algo posible, generando nuevos contextos con visión, perseverancia, disciplina y reconocimiento del valor”.
Raquel introduce el concepto de la “niña herida” y la relevancia de reconocer y regalonear a nuestra niña interior: “Reconectar con la niña interior significa volver a conectarte con esa parte de ti misma que es genuina, curiosa y llena de alegría. Es recuperar la inocencia y la capacidad de maravillarte ante la vida. Al reconectar con nuestra niña interior, podemos liberarnos de cargas emocionales y aprender a ser más compasivos con nosotros mismos.”
La conversación explora el proceso de sanación emocional y cómo Raquel encontró su “lugar seguro”, y destaca la metáfora de “la habitación propia”, Raquel enfatizó en la importancia de construir un espacio propio que refleje seguridad y libertad emocional y económica. Habló sobre los desafíos que enfrentan las mujeres en busca de equidad y visualizó un futuro donde la evolución de género alcanzará un equilibrio pleno. “La habitación propia tienes que construirla tú. Significa navegar por tus procesos emocionales, mentales y conducirlos hacia acciones concretas.”
Raquel destaca la importancia de los referentes femeninos en el desarrollo del autoliderazgo. Expresa su deseo de que su historia inspire a otras mujeres a construirse a sí mismas y abrazar su liderazgo personal. Raquel enfatizó en que “es muy importante que a esa edad -infancia y adolescencia- te vean, que te descubran, y que te reconozcan”, comentó Raquel. “Y destacar la importancia de seguir aprendiendo y creciendo para poder cimentarnos en lo que queremos con más igualdad y equidad”, concluyó.